¿De qué estoy hablando?

Imagínate:
Un día cansado de todo decides que tal vez lo pases mejor en otro estado, en otro lugar, ves aquello que te rodea y ves que ya no te parece atractivo ni divertido, nada era como lo veías antes.
Te despides de todo y dejas ese lugar. Te das cuenta de que no volverás a ver nada de aquello nunca más.
Te da igual, prefieres dejar de luchar contra aquello que te aleja de allí. Cuando empiezas tu marcha ves que ese nunca es nunca, que nunca verás NUNCA más a nadie, amigos, familiares...nada. Te das cuenta de que tal vez todo aquello te formó como persona y ahora lo abandonas todo para siempre. Tienes miedo, no sabes nada de lo que te espera, no sabes cómo será aquello ni si estarás mejor. Tienes mucho miedo. Quieres volver pero no hay marcha atrás...
Estoy hablando de la muerte.